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En colaboraciones anteriores he tenido la oportunidad de compartir nuestras experiencias sobre el proceso de selección y el desempeño de las personas que participaron como vocales en las juntas distritales y municipales para el proceso electoral 2021, destacando que se buscaron perfiles que garantizaran el adecuado funcionamiento de estos importantes órganos ubicados a lo largo del territorio estatal. 

Sin embargo, vale la pena destacar que este personal eventual -con funciones trascendentes para la organización y desarrollo de los comicios- colabora con personas servidoras públicas electorales de dos importantes ramas dentro de la estructura del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM): la administrativa y la del Servicio Profesional Electoral Nacional (SPEN). 

Dentro de las atribuciones de la Unidad Técnica para la Administración de Personal Electoral se encuentra la de ser Órgano de Enlace con el Instituto Nacional Electoral (INE) para atender los temas relacionados con el SPEN, ya que desde la reforma electoral de 2014 es facultad de la autoridad administrativa electoral nacional regular todo lo relacionado con el Servicio Profesional de Carrera en el ámbito electoral en todo el país, por lo que debe existir una coordinación con los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLE) en las entidades federativas para operarlo de manera adecuada. 

Cabe recordar que algunos institutos electorales locales ya contaban con su propio Servicio Profesional que venía funcionando a lo largo de los años, como el caso del Estado de México, a través de la otrora Dirección del Servicio Electoral Profesional. Con la reforma electoral antes señalada, fue necesario homologar los procedimientos con el INE y adoptar las disposiciones que emanaran de los órganos colegiados de dicha autoridad nacional para coordinar el funcionamiento de este Servicio que pasaba del ámbito estatal al nacional. 

El objetivo es claro, contar con personal profesional que se especialice en el ámbito electoral, que pueda formar parte de la estructura del INE o de los OPLE, a través de concursos públicos que implican diversas etapas, asegurando que sean los mejores perfiles quienes accedan a estos cargos. 

Para el caso del IEEM, estos espacios están distribuidos en áreas sustantivas para organizar los procesos electorales, como lo son las Direcciones de Organización, Participación Ciudadana y la de Partidos Políticos. El personal que logra acceder a estos cargos debe cumplir con metas que se fijan de manera periódica y mantener un esquema de capacitación constante, lo que puede derivar en la obtención de incentivos y reconocimiento al mérito, incluso pueden competir para acceder a un cargo superior mediante concurso interno al generarse vacantes. 

Lo que se ha buscado, con el anterior Servicio Electoral Profesional y a partir del 2014 con la Reforma Electoral, es contar con personal profesional que aporte su talento, conocimiento y experiencia para mejorar los procesos del IEEM, a fin de que sigamos siendo un Instituto de vanguardia, confiable e innovador. 

En las elecciones de junio del año en curso, el Instituto Electoral del Estado de México dio buenos resultados a la ciudadanía, demostrando una vez más que es una institución confiable e imparcial. Por causas ajenas a la actuación de las autoridades electorales, en este momento se lleva a cabo un proceso electoral extraordinario para elegir a los integrantes del Ayuntamiento de Nextlalpan.

Los buenos resultados no son casualidad, pues son consecuencia del esfuerzo de servidoras y servidores públicos electorales que desde las distintas áreas del Instituto han aportado su experiencia y trabajo para que, a pesar de la pandemia, la ciudadanía mexiquense pudiera salir a las urnas con el objetivo de decidir cual era la mejor opción política para sus distritos y municipios.

En ese sentido, es importante mencionar que estos trabajos no se realizan únicamente en las oficinas centrales, sino que en buena medida, quienes integran las Juntas Distritales y Municipales aportan también su conocimiento del contexto social, económico y político en las distintas demarcaciones, lo que permite que las elecciones se desarrollen de mejor manera.

De cara al 2023, desde la UTAPE buscamos fortalecer cada vez más a nuestros órganos desconcentrados, por lo que nos hemos dado a la tarea de comenzar con un análisis de su funcionamiento en el pasado proceso electoral, a fin de que los resultados nos ayuden a diseñar una estrategia que nos permita acercar a los mejores perfiles para ocupar las vocalías, pero también identificar áreas de oportunidad en las que podamos enfocar nuestros esfuerzos y generar mejores condiciones para los trabajos en cada Junta Distrital que se instale para la organización de las elecciones que definirán a la persona que ocupe la gubernatura en los próximos años.

No es una labor sencilla, pues son muchos los factores que influyen en la dinámica cotidiana de nuestras Juntas, algunos que se generan desde los propios órganos desconcentrados y otros más que requieren de una vinculación con el órgano central o con otras autoridades. Todo ello hace compleja la operación y organización de los comicios en el Estado de México, y por ello es importante que una vez concluido el proceso electoral no dejemos de trabajar en mejorar su funcionamiento.

Desde este espacio, hacemos un reconocimiento para las personas que ocuparon una de las 385 vocalías durante el proceso electoral 2021 y hacemos el compromiso de seguir generando mejores condiciones para que los objetivos institucionales se cumplan, observando en todo momento los principios rectores de la función electoral.

En espacios anteriores he tenido la oportunidad de abordar el tema de la evaluación del desempeño para las personas que ocuparon las vocalías en las Juntas Distritales y Municipales en el Proceso Electoral 2021; sin embargo, vale la pena retomar el tema una vez que ésta ha sido aplicada de manera satisfactoria.

Es importante recordar que en el mes de febrero del año en curso el Consejo General del Instituto aprobó los lineamientos para la aplicación de la evaluación del desempeño de quienes ocupan una vocalía en las Juntas Distritales y Municipales, misma que tiene por objeto medir y calificar el comportamiento laboral, individual y grupal; además de los resultados relacionados con las funciones que les fueron asignadas.

Con la evaluación se pretende además determinar el cumplimiento de las metas institucionales y que el resultado obtenido por las personas que ocuparon las vocalías sea objetivo, sirviendo además como un elemento a considerar en los subsecuentes procesos de selección de vocales a través de metas individuales, colectivas y su participación en la capacitación focalizada.

Gracias a la participación de diversas áreas del Instituto, se logró realizar exitosamente la evaluación del desempeño para este proceso electoral, por lo que el 12 de octubre la Junta General aprobó el informe sobre su aplicación y los dictámenes individuales de resultados.

Para seguir el principio de transparencia, los resultados se encuentran publicados en los estrados y en la página electrónica del Instituto. Destacando que los resultados arrojan que el desempeño de nuestros vocales fue muy bueno, pues el promedio general fue de 8.935, que se encuentra en el rango de “Desempeño Satisfactorio” y muy cerca del “Desempeño Sobresaliente”.

Como se puede desprender del párrafo anterior, las calificaciones no son absolutas, lo que implica que se encuentran divididas en una escala que va del cero al diez, dependiendo del nivel de satisfacción con el que desarrollaron sus actividades.

Aprovecho este espacio para extender una sincera felicitación a las personas que ocuparon una vocalía en el proceso electoral 2021, pues gracias a su labor se llevaron a cabo comicios exitosos en el Estado de México, llevando a una nueva integración de la Legislatura local y a la renovación de los 125 Ayuntamientos que componen nuestra entidad.

En días recientes, el Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México dio inicio formal a los trabajos correspondientes a la elección extraordinaria que se celebrará en el municipio de Nextlalpan. Ello es una muestra de que el sistema democrático que se ha formado en la entidad es sólido, pues ante distintos supuestos que generen duda sobre el resultado electoral que proviene de la voluntad popular, la legislación permite que se realicen nuevos comicios para que la decisión de la ciudadanía sea escuchada y respetada.

En ese orden de ideas, es importante señalar que para lograr que las elecciones extraordinarias se lleven a cabo se deben realizar trabajos en el propio Institutito muy similares a los que se realizaron para las ordinarias; es decir, se tiene que abrir una convocatoria para que quienes estén interesados en contender se registren, campañas electorales, impresión de boletas, capacitación a funcionarios de mesas directivas de casilla, entre otros.

Pero también dentro de las implicaciones que hay, se debe considerar que los órganos electorales en el municipio -hablando del caso concreto de Nextlalpan- tienen que instalarse, pues en estos espacios he abordado antes que en las elecciones de cada distrito electoral y municipio se integran órganos de suma relevancia para la vigilancia, organización y desarrollo del proceso electoral en cada rincón de la entidad, auxiliando a los órganos centrales del IEEM para que las elecciones se realicen conforme a lo planeado, además de garantizar el cumplimiento de los principios rectores de la materia electoral; me refiero, desde luego, a los órganos desconcentrados.

Me quiero referir al caso concreto de la Junta Municipal de Nextlalpan, misma que se integra con una vocalía ejecutiva y una de organización electoral, respetando el principio de paridad de género. El Reglamento para Órganos Desconcentrados del Instituto Electoral del Estado de México establece que para las elecciones extraordinarias, se podrá designar a las mismas personas que ocuparon esos cargos en la elección ordinaria, siempre que su actuar no hubiere sido un factor para que se tuvieran que realizar los comicios extraordinarios.

En Nextlalpan, tuvimos la fortuna de contar con perfiles que estuvieron a la altura de la complejidad que implicó hacer frente a la renovación de los miembros del Ayuntamiento en esa localidad, por lo que el Consejo General tomó la decisión de designarlos para desempeñarse en esta elección extraordinaria, pues además de su experiencia en la materia, tienen un conocimiento de las situaciones políticas, sociales, culturales y geográfica que imperan en su municipio.

Así las cosas, podemos estar seguros de que estas elecciones serán exitosas; que se escuchará la decisión de la gente en las urnas y se dará certeza a las y los electores del resultado que se genere. Sigamos atento al desarrollo de los trabajos que ya se han iniciado.

Hasta la próxima.

Un sistema democrático en la actualidad asegura que de manera periódica se realicen elecciones, a través de instituciones confiables que organicen cada etapa del proceso electoral, bajo el escrutinio público y de los actores políticos que participen en la contienda.

Cuando funciona correctamente, este sistema brinda la oportunidad de reconfigurar la conformación de los poderes políticos (al menos titular del ejecutivo e integrantes del poder legislativo, como en el caso mexicano), dependiendo de los resultados que entreguen quienes tengan el privilegio de representar a la población y de la realidad que prevalezca en el entorno político de ese momento histórico.

De ello se desprende que al ser una prerrogativa de los ciudadanos el expresar su voluntad en las urnas, el voto razonado se haya vuelto una práctica que en cada elección subsecuente gana adeptos, aunado a que las últimas reformas en el país, por ejemplo la que permite la reelección en los puestos dan más oportunidades para refrendar la confianza de la ciudadanía en algún personaje político que ha desempeñado un cargo de elección popular -a excepción, en México, de la Presidencia de la República y las Gubernaturas de los Estados- en un ejercicio real de rendición de cuentas, pero que reconoce también la posibilidad de no ser ratificados en las elecciones siguientes si su trabajo no cumplió con las expectativas de las y los electores.

Ello permite evidenciar que la democracia, en conjunto con la rendición de cuentas a la ciudadanía, representa una fórmula ganadora que abona a la transparencia en el actuar gubernamental y que se ha vuelto además, un factor importante al momento de tomar una decisión cuando se está frente a una boleta electoral.

Cada día, las y los electores tenemos más elementos a nuestra disposición para evaluar el trabajo de quienes nos gobiernan, pues a través de redes sociales y otros medios de comunicación es que podemos estar actualizados sobre las actividades, decisiones y posturas que adoptan nuestros representantes; contrarrestando la opacidad en su actuar y sometiéndolos a un continuo escrutinio público que debe permitir el debate público, así como coexistir con diversas posturas por la creciente pluralidad de ideas.

Así las cosas, es importante mantener el rumbo que asegure una democracia cada vez más fortalecida por la rendición de cuentas, la participación ciudadana, transparencia en gobiernos e instituciones públicas, así como el interés público por las decisiones que toman nuestros representantes, pues al final definen el futuro hacia el que nos dirigimos.

Por todo lo anterior, no dejemos de involucrarnos y participar, pues la democracia no se limita a la emisión del sufragio en la jornada electoral, sino que es parte de la cultura diaria de las sociedades que la adoptan como forma de gobierno.