Comunicación
Social

La teoría general de la administración está pasando por una profunda e intensa revisión, el mundo sigue cambiando vertiginosamente, por lo cual, debe adaptarse a una realidad diferente y dinámica cada día. Pero ¿Hacia dónde? ¿En qué dirección?

 

En este acercamiento se tratará de mostrar una alternativa, considerando que la gestión del conocimiento y el capital intelectual es un camino por el cual se puede transitar hacia el futuro inmediato, asimismo; reconocer que en esta era de la información, el recurso más importante dejó de ser el capital financiero, ahora lo es el capital intelectual basado en el conocimiento.

 

Actualmente el capital financiero guardó su importancia relativa; sin embargo, depende totalmente del conocimiento sobre cómo aplicarlo y rentabilizarlo adecuadamente.

 

El conocimiento se ha quedado en la delantera de todos los otros recursos organizacionales, pues todos dependen del conocimiento, entendiendo que conocimiento es la información estructurada que tiene valor para una organización. El conocimiento construye nuevas formas de trabajo y comunicación, nuevas estructuras y tecnologías y las nuevas formas de interacción humana.

 

La organización basada en el conocimiento depende por lo tanto, de la gestión del conocimiento.

 

Continuando con esta perspectiva, se requiere definir ¿Qué significa gestión del conocimiento? Para Doroty Leonard Barton (2005) “es un proceso integrado destinado a crear, organizar, diseminar e intensificar el conocimiento para mejorar el desempeño global de la organización”. Por lo tanto, no es cualquier conocimiento que interesa, sino se trata de decidir cuál es el conocimiento crítico que importa realmente a la organización.

 

 

La organización exitosa es aquella es aquella que logra aplicar y rentabilizar su conocimiento. Sin embargo, el conocimiento es un recurso diferente, que no ocupa espacio físico, es un activo intangible, por ello; Ikurijo Nonaka (2006) establece que “en una organización del conocimiento los asuntos financieros no respetan necesariamente el verdadero valor del negocio”. Señala que “existen activos intangibles aún no registrados por los tradicionales métodos de la contabilidad y que se identifican como nuestras personas, nuestros clientes y nuestra organización”.

 

Profundizando en esta perspectiva de lo intangible Karl Erik Sveiby (2007) describe estos 3 elementos y construye un esquema el cual se presenta al final de este documento.

 

  1. Nuestros clientes. Se basa en el valor proporcionado por el crecimiento, fuerza y lealtad de los clientes. Se refiere a la estructura externa, es decir, a la relación con los clientes y su impacto en los retornos e imagen y con esa estructura puede expandirse para incluir nuevas relaciones externas.
  2. Nuestra organización. Se basa en el valor derivado de nuestros sistemas, procesos, creación de nuestros productos o servicios y el estilo administrativo. Se refiere a la estructura interna que incluye sistemas y procesos, herramientas de negocios, marcas registradas y cultura organizacional.
  3. Nuestras personas. Basado en el valor de la organización proporcionado por el crecimiento y desarrollo de las competencias de las personas y cómo esas competencias se aplican a las necesidades de los clientes. Se refiere a las competencias y habilidades de los empleados para que actúen eficazmente en una amplia variedad de situaciones.

 

Por lo anterior, se identifica que actualmente, las organizaciones exitosas utilizan indicadores (eficiencia, renovación, crecimiento y estabilidad), para administrar y monitorear sus activos intangibles, pues el valor de estos supera muchas veces el valor de sus activos tangibles. Aún más se observó que administrar personas es la prioridad antes, durante y después de la administración de cualquier recurso organizacional, sea capital, máquinas, instalaciones, tecnologías, etc.

 

 

Capital intelectual Activos intangibles e invisibles

Estructura externa

Relaciones con clientes y proveedores, marcas, reputación e imagen.

Depende de cómo la organización soluciona y ofrece soluciones para los problemas de los clientes

Capital externo

Estructura interna

Conceptos, modelos, patentes, sistemas administrativos e informativos.

Son creados por las personas y utilizados por la organización

Capital

interno

Competencias individuales

Habilidades de las personas en actuar en determinadas situaciones. Educación, experiencias, valores y habilidades sociales

Capital humano

 ➢ El capital intelectual, según Sveiby

 

Mtro. M. Adrián González Flores

Presidente IRH Filial Metepec

 

 

 

 

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