Comunicación
Social

Los procesos electorales involucran a toda la sociedad, a los partidos políticos, a diversas instituciones públicas y, especialmente, a los organismos encargados de que la ciudadanía cuente con una boleta para ejercer su voto; es decir, los institutos electorales.

Los organismos públicos locales electorales en el ámbito estatal, y el Instituto Nacional Electoral en todo el territorio, adquieren una serie de compromisos y responsabilidades fundamentales para impulsar no solo las elecciones, si no procesos democráticos y de participación ciudadana en general.

Si hablamos específicamente de los periodos electorales, en términos de difusión, los organismos mencionados tienen diversos compromisos a fin de que las y los ciudadanos ejerzan en tiempo y forma su derecho al voto. Entre ellos, está la difusión de ciertos temas como: los cargos a elegir; las modalidades en que se podrá ejercer el voto; la ubicación de las casillas, así como las formas en que las y los ciudadanos pueden materializar ese derecho, principalmente.

En términos de promoción y difusión, esas responsabilidades son asumidas a través de la Comunicación Institucional que, a su vez, debe permear a todos los niveles de la institución a fin de generar mensajes homologados y, por tanto, una narrativa homogénea.

En el caso del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), la Unidad de Comunicación Social (UCS) diseñó e implementó la Estrategia de Comunicación 2024, cuya visión es integral, e integradora, pero también focalizada para cada una de las regiones que conforman una entidad tan diversa como la mexiquense.

La Estrategia de Comunicación marcó las directrices a seguir para informar a la ciudadanía sobre diversas actividades y temas de la Elección de Diputaciones Locales y Ayuntamientos 2024, de forma oportuna y creativa, a través de diversas vías de comunicación, y utilizando una división territorial específica que tomara en cuenta las características propias de las zonas, las particularidades demográficas de sus habitantes, así como las publicaciones y medios con mayor alcance en esos lugares.

Si bien una Estrategia es fundamental para implementar adecuadamente acciones comunicacionales y de difusión, en línea a un proceso técnico-creativo, esta debe estar siempre subordinada a principios institucionales que deben respetarse, así como a objetivos que como institución estamos obligados a observar, en línea a la normativa aplicable.

En términos de difusión y, por mencionar algunos, podríamos enunciar: 

• Comunicar desde la imparcialidad, sin sesgos políticos;
• Destacar la libertad de las personas al momento de ejercer el voto;
• Brindar los datos necesarios para que las y los ciudadanos voten de forma informada, libre y razonada;
• Divulgar los lugares, y modalidades, donde se podría votar, tanto en México, como en el extranjero, entre otras.

Para todo lo anterior, es prioritario el uso de un lenguaje de fácil comprensión para la mayoría de las personas; es decir: Un lenguaje ciudadano.

El uso del lenguaje ciudadano es también una vía de la Comunicación Institucional para acercarse a los distintos segmentos que atienden la información generada por el IEEM. El objetivo es acercar a los segmentos más jóvenes, desde las infancias, pasando por las y los adolescentes, hasta los adultos mayores, pero también, en el ánimo inclusivo del Instituto, a mujeres, personas con discapacidad o pertenecientes a algún grupo históricamente discriminado.

De esta forma, el IEEM atiende también una de las tareas sustantivas de los organismos electorales: promover la participación ciudadana.

Gracias a las campañas de difusión y a la estrategia implementada, los mensajes que estimulan la participación llegan a más personas, buscando generar interés no solo para el ejercicio del voto, sino para sumarse a la organización del proceso electoral.

En este sentido, se enfatizan los espacios en los que las y los mexiquenses pueden participar como: integrantes de los órganos desconcentrados en Vocalías y Consejerías; monitoristas; capturistas del Programa de Resultados Electorales Preliminares, u observadores electorales.

Una estrategia definida en objetivos, metas y alcance dará como resultado que la sociedad pueda ejercer sus derechos político-electorales de una manera libre, informada y razonada, contribuyendo de forma determinante a la consolidación de la democracia.