Hoy se celebra la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Francia, la designación de la persona que ocupe la presidencia es mediante una elección de dos vueltas. Para que una candidata o candidato salga vencedor en la primera vuelta, requiere de mayoría absoluta, más del 50 % de los votos; de lo contrario, los dos aspirantes más votados pasan a una segunda vuelta que se lleva a cabo dos semanas después.
Los resultados de la primera vuelta, celebrada el pasado 10 de abril fueron: Emmanuel Macron, el actual presidente, que busca la reelección, obtuvo 27.8 % de los votos. Le siguió de cerca Marine Le Pen, candidata de derecha radical de Reagrupamiento Nacional, con 23.1 %. Jean-Luc Mélenchon, líder populista de Francia Insumisa, recibió 21.9 % y estuvo a punto de pasar a la segunda ronda de las elecciones. Con 7 % de los votos, siguió un recién llegado a la escena política: Eric Zemmour, periodista de extrema derecha que abanderó los viejos ideales ultra nacionalistas y xenófobos de Le Pen.[1]
Por lo que respecta a los partidos tradicionales, los gaullistas y los socialistas, formaciones políticas que se han alternado en la presidencia francesa desde 1981, obtuvieron votaciones menores al 5%. Valérie Pécresse, candidata del partido gaullista de Los Republicanos (LR), alcanzó un 4.7 %, apenas por encima del candidato ecologista Yannick Jadot, que recibió 4.6 %. Anne Hidalgo, la candidata socialista y alcaldesa de París, con 1.7 %.[2]
Un dato a resaltar de la primera vuelta es el alto índice de abstención: 25.1 %, que aumentó con respecto a la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2017, donde fue de 22.2 %. El abstencionismo no ha dejado de aumentar desde las elecciones de 2007, cuando alcanzó un 16.2 %. Esta tendencia al alza, ha sido interpretada como un signo de apatía o despolitización de la ciudadanía francesa.
El primer dato que sobresale en los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Francia, celebrada el pasado 10 de abril, es el alto índice de abstención: 25.1 %, que aumentó con respecto a la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 2017, donde fue de 22.2 %. De hecho, no ha dejado de aumentar desde los comicios de 2007, cuando alcanzó apenas 16.2 %. El creciente abstencionismo ha sido interpretado como un signo de “apatía” o “despolitización” de las y los franceses. Tal conclusión es cuando menos arriesgada, como lo demuestra el vigor de la participación asociativa y el interés por la política entre los franceses.
Por el momento los sondeos otorgan a Macron el 55 % de la intención de voto, luego del álgido debate entre ambas candidaturas, pero es innegable que Le Pen y su movimiento de Reagrupamiento Nacional, partido de extrema derecha y partidario de una alianza con Rusia tiene posibilidades de llegar al Elíseo como nunca la había tenido. Ante esto, hay que insistir sobre la importancia del trabajo de renovación democrática que se esperaría para la ciudadanía francesa, independientemente del resultado de las elecciones de este domingo.
[1] RTVE. Resultado de las Elecciones Francia 2022, resultados de la primera vuelta. Visto en: https://www.rtve.es/noticias/elecciones-francia/resultados/ (recuperado el 21 de abril de 2022)
[2] Ministerio del Interior, Resultados oficiales de la primera vuelta. Visto en: https://www.resultats-elections.interieur.gouv.fr/presidentielle-2022/FE.html (recuperado el 21 de abril de 2022)