La juventud, factor de esperanza democrática mundial
Escrito por usuario genericoEl futuro está en los jóvenes; una frase que podría parecer trillada, un lugar común. Sin embargo, debemos repetirnos dicho enunciando las veces que sean necesarias hasta entender que para un mejor porvenir es prioridad proteger y cuidar a nuestros jóvenes.
Es decir, ofrecerles las mejores posibilidades para una buena educación, un entorno familiar sano, centros de recreación de acuerdo a sus necesidades, una sociedad sin violencia, donde se sientan seguros y sanos en salir a la calle. Además, hay que entender su nueva ideología para no provocar un rompimiento generacional que aleje a la juventud de sus generaciones anteriores.
Así crearíamos una sociedad que en el futuro sea más participativa, incluyente, tolerante, consiente de los problemas climáticos y solidaria; en nuestras manos, como individuos y como sociedad, está desarrollar las herramientas necesarias para que eso suceda.
Al respecto, las políticas públicas deben ir enfocadas en no juzgar ni intentar aleccionar a los jóvenes, sino permitirles crear su propio lenguaje, siempre que esté en el marco legal, respetarlos y comprenderlos.
Más ahora que estamos viviendo una situación muy difícil, la pandemia provocada por el coronavirus ha cambiado las reglas del juego de la vida y son los jóvenes quienes contarán cómo fue que salimos de esto; de nuevo ellos son nuestra esperanza, el futuro.
Por eso la importancia de festejar y cuidar la juventud, de debatir con ellos y ellas acerca de democracia y política, ya que serán los que decidan el camino que seguiremos en unos cuantos años.
Escucharlos, entenderlos y dejar que se manifiesten es un derecho que debemos respetar, cuidar y sobre todo aplaudir.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se estima que en México hay 30. 6 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años, que representan 25.7 % de la población total.
En ese sentido, nadie de esa cifra debe ser excluido, ni marginado, si bien vivimos en un país con una gran desigualdad, podemos y debemos realizar los actos necesarios para que cada joven tenga una vida plena; todavía falta mucho trabajo para alcanzar una paridad.
Este 12 de agosto se celebró el Día Internacional de la Juventud, festejo que nació en 1999 cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas designó dicho día gracias a las recomendaciones de la Conferencia Mundial de Ministros de la Juventud, con el objetivo de promover a los jóvenes como un factor esencial en los procesos de cambio.
Asimismo, el Día Internacional de la Juventud tiene el propósito de generar un espacio para la reflexión sobre los problemas a los que los jóvenes se enfrentan actualmente.
Un festejo que celebra la juventud desde una perspectiva de apoyar sus acciones y sus iniciativas; las cuales siempre traen propuestas novedosas y de gran aporte para la sociedad.
Por eso, aunque parezca una frase trillada, repitámosla las veces que sea necesaria y cuidemos que así sea: el futuro está en la juventud.